Cosmética, alimentación, higiene, en definitiva, aquello que consumimos a diario y muchas veces de primera necesidad, todo ello buenas razones para llenar los estantes de un supermercado con envases. Envases de plástico, vidrio, cartón, cohabitan a diario con todos nosotros. Pero, ¿somos conscientes del impacto del packaging en el medio ambiente?
Las marcas invierten y desarrollan sus envases para presentarse de la forma más cómoda e impactante, y en nuestros tiempos, sostenible.
¿Qué ocurre en los despachos de las grandes marcas? Pues es bien sencillo, cada vez son más conscientes de la cantidad de residuos que generan y eso es una seria amenaza para el medio ambiente. Lo mismo ocurre en el hogar de los consumidores, trabajos, escuelas… en definitiva, la sociedad necesita un cambio y debe ser promocionado por los productores. Creo que ahora todos somos, en mayor o menor medida, mucho más responsables en este aspecto. Esto es cosa de todos.
Celebramos cuando se introdujo la tarifa de la bolsa de plástico en toda Europa, aunque algunos abusan cobrando las de papel también. Estamos emocionados de ver que las tiendas de residuos cero están ganando popularidad y esperamos con interés la prohibición de ciertos plásticos.
No quiero culpar al plástico cómo único demonio de esta película. ¿Deberíamos ser tan rápidos en juzgar sin considerar los efectos negativos de otros envases?
Echemos un vistazo más holístico al impacto real de los envases en el medio ambiente.
La gota que colma el vaso: el impacto a largo plazo del embalaje en el medio ambiente
Debería asumir que todos los desechos son eliminados responsablemente en cubos de reciclaje, el otro día leí que 14 millones de toneladas de microplásticos contaminan el fondo de los océanos, lo cierto es que todavía existe mucha población en todo el mundo sin una cultura ni educación medioambiental. Los científicos indican que la cantidad de plástico existente en el lecho marino es 25 veces mayor de lo que se creía.
Además, calculan que abocamos al mar al menos unas ocho millones de toneladas de plástico cada año. Definitivamente, no reciclamos de forma eficaz o al menos, no estamos consiguiendo resultados esperanzadores.
Continuamos desechando y produciendo nuevos envases de un solo uso para satisfacer la demanda de todos. “No lleva mucho tiempo darse cuenta de la locura de esta economía lineal, no circular. El impacto de este ciclo de envasado sin fin en el medio ambiente.”
¿Es entonces el plástico realmente el mayor culpable?
Los plásticos juegan un papel importante en nuestros problemas ambientales actuales pero quizás el consumo de productos de un solo uso es el mayor. ¿En qué momento perdimos la bolsa de pan colgada?. En mi caso, sigue detrás de la puerta de la cocina.
Quizás reutilizar cosas es más sensato que comprar o producir de nuevas. De todas formas, la industria del packaging y PLV puede hacer mucho para limitar este impacto. Los fabricantes conocemos las bondades del plástico pero también del cartón, y como este puede ayudar a minimizar el impacto negativo del envase en nuestra sociedad.
Una campaña de publicidad que habla de embalaje sostenible y pretende empezar un esperado cambio
Estrella Damm #Mediterráneamente acaba de lanzar una campaña que habla precisamente de esto, de responsabilidad, las marcas pues no son ajenas a nuestra realidad y están moviendo las cosas, eso es bueno.
El eslogan de la nueva campaña: «Ser natural también es ser responsable». #CadaEstrellaQueHacemos
En 2020 han empezado con la implementación de un sistema que sustituye las anillas de plástico por cartón 100% biodegradable. ¿Buena idea no?
En estos momentos hay marcas que piensan en el futuro, todos agradecemos esa acción y la industria, culpable en parte de nuestro medioambiente, sabe reaccionar, lentamente, pero lo hace.
En mi opinión, el cartón es preferible y por esa razón, en Gráficas JR contribuimos y nos focalizamos en la producción de elementos en cartón. “Todas las materias primas y procesos que desarrollamos son respetuosos y sostenibles con el medio ambiente”. En el año 2020 renovamos, como cada año, nuestra certificación medioambiental. Hemos realizado la implantación interna de una certificación de Gestión Forestal, que incluye el certificado FSC® y el certificado PEFC ™. Esto nos asegura que nuestra materia prima proviene de un bosque que ha sido gestionado, evaluado y certificado de acuerdo con los estándares sociales, económicos y medioambientales definidos por estas mismas organizaciones. El uso de barnices sustituyendo el el películado (plástico) y las tintas con base en agua, nos presentan como una alternativa responsable en el mercado, somos una garantía medioambiental sostenible.
Para nosotros es una filosofía, una manera de entender el negocio, sostenible y adaptado a las nuevas marcas que quieren aportar su granito de arena. En 2020 iniciamos el proceso de implementar paneles de energía solar para poder disponer de un suministro eléctrico limpio en todos nuestros procesos industriales.